Desde medio día partimos con un grupo 30 amigos al volcán de pacaya, para admirar la belleza que éste tenia guardada para nosotros. Todo apuntaba a que nos llovería en el volcán, sin embargo disfrutamos de un clima espectacular y unas vistas a los volcanes impresionantes, sin mencionar los ríos de lava.
Iniciamos el ascenso a las 14:30 hrs, y desde ya teniamos todos la emoción de estar en la cima. En los viajes no puede faltar los niños que nos ofrecen bastones para el ascenso o bien caballos por si «no aguantamos» la subida. Y conocen muy bien su negocio porque siempre logran rentar más de uno en cada viaje.
Durante este ascenso, tuviamos que avanzar un poco más de lo común, puesto que los ríos de lava se encuentran más al Sur. Sin embargo, para poder apreciarlos vale la pena incluso darle tres vueltas al volcán.
Poco antes de llegar a los ríos de lava, caminamos algunos metros por lava petrificada, incluso algunas rocas quebradas donde se ponia apreciar por las ranuras, las piedras incandecentes por debajo de nosotros.
Y por fin nos llegó el momento, frente a nosotros un impresionante río de lava de un metro de ancho aproximadamente y más de 15 metros de largo frente a nuestros ojos. Impresionante ver y sentir el calor que llega a generar la lava (hasta 2,200° F).
Para terminar nuestra aventura, tuvimos un hermoso atardecer con vista al volcán de Agua, Fuego y Acatenango. Posteriormente iniciamos el descenso por la noche con varías caidas y resbalones pero sin ninguna novedad.
Vale la pena mencionar a nuestro paramédico «Rescatito«, quien tuvo trabajo todo el día y estuvo siempre al pendiente de la salud de todos nuestros participantes, incluso de un extranjero que se lastimó en el camino.
Extremo a Extremo les da las gracias por haberse unido a esta aventura, y esperamos seguir viajando juntos de extremo a extremo por Guatemala. Los invitamos a dejer sus comentarios sobre su experiencia de ascenso.
Saludos
Fotos del ascenso al Pacaya