El Volcán Tajumulco es el punto más alto de Guatemala y Centroamérica, con una imponente altitud de 4,220 metros sobre el nivel del mar. Ubicado en el departamento de San Marcos, este coloso de origen volcánico —actualmente extinto— representa no solo un desafío natural, sino también un símbolo sagrado lleno de historia y leyenda.
Conocido en lengua mam como Chman, el Tajumulco ocupa un lugar central en la cosmovisión de los pueblos originarios. Según relatos ancestrales, este volcán guardó los bienes esenciales de la humanidad en tiempos míticos: maíz, frijol, agua, animales, fuego, y más. Se dice que un pájaro carpintero reveló el secreto cuando entró al cerro y permitió a los habitantes descubrir los tesoros ocultos del mundo.
En términos geológicos, el Tajumulco se distingue por su superficie arenosa, lo que convierte su ascenso en una experiencia exigente. Aunque no es la opción preferida para todos los excursionistas, su cima recompensa con vistas espectaculares de las montañas y volcanes que rodean la región. La mejor estrategia de ascenso consiste en avanzar en líneas diagonales cruzadas, evitando así el deslizamiento constante del terreno suelto.
Explorar el Volcán Tajumulco no solo es una experiencia natural extrema, también es una oportunidad para reconectar con las raíces culturales de Guatemala. Ideal para campamentos corporativos, actividades de integración o simplemente para aventureros que buscan superar sus límites.
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